Iniciamos este mes nuestro devocional y ayuno con los alumnos de Licenciatura en Música Ministerial donde los alumnos de doceavo cuatrimestre dirigieron un tiempo de alabanza y adoración, contando también con una reflexión por parte del alumno Rafael Valencia quien nos habló de lo difícil que es hallar una explicación a las cosas malas que nos suceden y nos compartió 3 puntos para entender el propósito y la voluntad de Dios en medio de la dificultad…
- Entender que la prueba no viene por un pecado, si no por un propósito.
- Confía en Dios (su sabiduría es inalcanzable).
- Adora (bendice a Dios en los tiempos buenos y los malos).

Rafael Valencia
Alumno de la Licenciatura en Música Ministerial
«Si hoy estás bien, adora a Dios no esperes a que lleguen los tiempos malos, busca su sabiduría y amor, si por el contrario estás pasando por un mal momento también adora y vive esa experiencia con Él. Adoremos en todo momento».
Posteriormente Viviana Argüello alumna del Instituto nos compartió un poco acerca de su testimonio y cómo a pesar de todo lo vivido, Dios ya tenía un propósito para su vida…

Viviana Argüello
Alumna de la Licenciatura en Música Ministerial
«Tuve una infancia y adolescencia difíciles pero a veces Dios nos permite vivir cosas difíciles porque tiene propósitos grandes para nosotros»
A los 6 años tuve un accidente automovilístico que marcó mi vida, durante la adolescencia mis padres se divorciaron y probé de todo tipo de cosas; al entrar al bachillerato decidí limpiar mi vida y cambié todo lo que hacía por ganas de superarme, mi vida estaba planeada y lista para estudiar Ingeniería Química, cuando Dios puso un alto y los doctores me desahuciaron, sin embargo Dios trabajó conmigo y mi familia, me acerque a Él y comencé a buscarlo ya no tenía nada que ofrecerle pero fue entonces cuando encontré mi propósito de vida y mi llamado a servirle a Él a través de la música.
Para finalizar nuestro devocional el director del Instituto dirigió una oración de intercesión por los alumnos pidiendo la voluntad de Dios en nuestras vidas y entregando el ayuno realizado durante el día, terminando pudimos disfrutar de la comida y un tiempo especial de convivencia.